En Cantabria, como en casa

Seguimos avanzando en el cumplimiento del objetivo principal, mostrarles a los ciudadanos cántabros en qué consisten las misiones de servicio directo a la Casa de Su Majestad el Rey

     A punto de comenzar el cuarto día de despliegue en la comunidad, ya podemos asegurar que todos los guardias reales nos sentimos como en casa. Rodeados por el mar Cantábrico, extensos valles —donde se producen los mejores ingredientes de su gastronomía— y elevaciones montañosas por el horizonte hacia el sur, solo nos queda charlar con sus gentes para sentir que estamos en una inmensa sala de estar.

     Pero antes de disfrutar del asueto hay que aplicarse y alcanzar los objetivos marcados. Por este motivo, el Grupo de Escoltas iniciaba la jornada apoyando al Grupo Mixto en Polientes con varias motocicletas. Al mismo tiempo, algunos de sus componentes impartían varias charlas educativas en un centro escolar de San Vicente de la Barquera. La Sección de Guías de Perros llevó a cabo una exitosa colaboración con un centro canino de la localidad, donde, para sorpresa de los guías, asistió un centenar largo de amantes de los canes. La localidad de Camargo también disfrutó, en la sesión de tarde, del rugido y el brillo de los motores de las Harley Davidson de la Sección de Motos.

     Por su parte, la Compañía de Alabarderos se puso de parte de la ley y el orden mientras intercambiaban procedimientos con varias policías de la comunidad durante los cuales se probaron diversos materiales policiales y de control de masas. El escuadrón de Escolta Real puso rumbo con sus adrales a Camargo y Torrelavega para apoyar al Grupo de Honores y participar en uno de los platos fuertes de la agenda del día: la exhibición de capacidades en este municipio al sur de la costa. La Batería Real llevó a cabo un acto de homenaje al capitán Pedro Velarde en su localidad natal, Camargo.

     Varios miembros de la Compañía de Monteros de Espinosa estuvieron gran parte de la mañana delante de una pantalla para hablar sobre las misiones de la Guardia Real y la Cultura de defensa en diferentes colegios de Santoña y en una residencia de ancianos de la localidad. El resto de monteros se desplazó hasta Bárcena de Cicero para llevar a cabo una visita cultural y llenar la mochila de historias sobre Cantabria. La Compañía Mar Océano siguió un esquema de actividades muy similar; en este caso impartieron charlas en centros escolares de Laredo y la visita cultural tuvo como destino una industria conservera local. Ya en horario de tarde organizó una exposición estática de material y un arriado de bandera solemne seguido de un desfile por las calles de centro de la localidad. Esta misma unidad, junto con su hermana, la Compañía de Monteros de Espinosa compartió una actividad especial de confraternización en la playa de Berria. Varios componentes del Grupo de Alta Montaña acometieron una ascensión a Peña Vieja (Picos de Europa). Durante el itinerario auxiliaron a una mujer que había sufrido un accidente. Le prestaron las primeras atenciones y avisaron a un helicóptero del Servicio 112, que evacuó a la herida al hospital.

     De nuevo citamos a Camargo como una de las localidades objeto de varias charlas informativas en centros escolares que impartió la Escuadrilla Plus Ultra y una demostración de la Sección de Movimientos Floreados. Esta unidad también mostró su pericia con el fusil en Polientes.

     El Grupo de Buceo volvió a subirse a las lanchas neumáticas para llevar a cabo una actividad ambiental, la limpieza de fondos marinos en Laredo. Más tarde devoraron millas en aguas abiertas entre esta misma localidad y Castro‑Urdiales durante las prácticas de navegación en superficie.

     El Grupo Mixto amanecía en la plaza del Ayuntamiento de Valderredible para llevar a cabo su ya clásica formación militar y el posterior izado solemne de bandera que aderezó con un pasacalle, motocicletas Harley Davidson y la presencia de la Sección de Movimientos Floreados. Más tarde, en Polientes, impartió una charla para escolares en el Ayuntamiento y una exposición estática con pista infantil. De nuevo, por la tarde, exposición, pista infantil y arriado solemne de bandera, pero esta vez en el municipio de Campóo de Yuso.

     La Unidad de Música fue la protagonista indiscutible de una de las actividades más esperadas de nuestra presencia en Cantabria: un concierto en el Palacio de Festivales de Santander. Con un aforo rozando el lleno total, los ciudadanos que nos acompañaron se deleitaron con la calidad de la música, pero sintieron de manera muy especial, puestos en pie, la interpretación del tema Viento del norte, con una novedad: los acordes principales salieron de una gaita asturiana que ha venido para quedarse. No se había vuelto a escuchar este instrumento durante los últimos años de existencia de la unidad.

     Otra de las actividades principales de la jornada fue la exhibición de capacidades en el recinto ferial de ganado de Torrelavega. El Grupo de Escoltas se encargó, por segundo día consecutivo, de la organización del evento, que congregó un elevadísimo número de espectadores. Muy similar al del día anterior en Santoña, se demostraron destrezas evasivas, de defensa personal y escolta de autoridades; exhibición canina; actuación de la Banda de Clarines y Timbales; carrusel del Escuadrón de Escolta Real; instalación de un check point; entradas en posición y disparo de una salva de artillería.

      Finaliza la jornada de viernes con un amplio programa de actividades en el que los guardias reales han puesto, de nuevo, todo su empeño. En el Palacio de Exposiciones y Congresos está a punto de concluir la exposición histórica que relata, con diversos materiales de apoyo, la historia de la Guardia Real. Este sábado permanecerá abierta entre las 10 y las 14 horas.

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