Ya estamos en La Rioja

Las diferentes unidades de la Guardia Real, que se han trasladado a la comunidad, han abandonado sus cuarteles madrileños de El Pardo y ya están instaladas en su municipio de destino

Como suele decirse en el argot militar, las diferentes unidades de la Guardia Real participantes en el ejercicio se encuentran en La Rioja sin novedad. Toda la jornada de la mañana y parte de la vespertina se han dedicado al embarque, transporte e instalación en los municipios de la comunidad que los acogerá hasta el próximo domingo. Así, el Grupo de Escoltas —Compañía de Alabarderos, Compañía de Control Militar, Escuadrón de Escolta Real y Batería Real— se ha desplegado en la zona oriental de la provincia. El Grupo de Honores —Compañía Monteros de Espinosa, Compañía Mar Océano y Escuadrilla Plus Ultra— lo ha hecho en el área noroeste. El Grupo Mixto —compuesto por personal del Grupo de Apoyo, el Grupo de Logística y la Sección de Asuntos Económicos— se ha establecido en el extremo sur oriental. Por último, el jefe de la Guardia Real y su Estado Mayor, junto con su Equipo de Apoyo al Mando, ha fijado el puesto de mando del ejercicio en la Delegación de Defensa de Logroño. Desde aquí se controlarán todas las actividades, desde el propio traslado de hoy hasta la organización de la jura de bandera del día 8.

El complejo despliegue de más de medio millar de militares y la cantidad de medios técnicos que los acompañan obliga a aprovechar el tiempo al máximo. Por ello, en la misma tarde del día de llegada han empezado las actividades. En concreto, varios componentes de la Compañía de Alabarderos han llevado a cabo una colaboración con las policías locales de los municipios de Arnedo, Arnedillo y Calahorra. Durante el encuentro se han intercambiado procedimientos de actuación que redundarán, sin duda, en la efectividad de sus actuaciones. Ambas instituciones, la Guardia Real y las policías, comparten un mismo objetivo: prestar el mejor servicio a los ciudadanos a los que se deben.

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