Relevo solemne de la Guardia

Relevo solemne de la Guardia del Palacio de Capitanía General en A Coruña:

El Cuartel General del Mando de Apoyo a la Maniobra, cuya sede está en el Palacio de Capitanía General en A Coruña, realiza los últimos viernes de mes, a las 11:00 horas, el relevo solemne de la guardia del citado Palacio. Este acto tiene carácter extraordinario y tiene lugar frente a la emblemática fachada del histórico edificio siguiendo una secuencia que desde hace varios siglos se ha venido realizando diariamente en todos los acuartelamientos y bases militares españoles. Todo el personal viste el uniforme de diario y porta el armamento reglamentario en el Ejército de Tierra.

La Fuerza participante pertenece a la Unidad del Cuartel General del Mando de Apoyo a la Maniobra y está integrada por:

• Guardia entrante.
• Guardia saliente.
• Banda de Cornetas y Tambores.
• Unidad de Música del Cuartel General.

La secuencia de los actos del Relevo solemne es la siguiente:

• Al toque de Asamblea, toque que se utiliza para indicar que se debe proceder al relevo de las guardias, se reúnen para realizar el relevo de la de seguridad, tanto la entrante como la saliente.
• Con anterioridad al comienzo del relevo de la guardia, se ha pasado revista a la guardia entrante en la Plaza del General Azcárraga, comprobando el estado del equipo, armas y municiones, asegurándose que no hay ninguna falta o cambio de personal y que todos conocen las obligaciones generales de la guardia de seguridad.
• Entrada en la Plaza de la Constitución de la Autoridad Militar que preside el acto.
• La guardia que ha de ser relevada, denominada guardia saliente, espera formada con el arma sobre el hombro a la guardia entrante que llega desfilando a los sones del toque de Asamblea, acompañada por la Banda de Cornetas y Tambores y la Unidad de Música del Cuartel General del Mando de Apoyo a la Maniobra.
• Una vez formadas las guardias que se relevan, frente a frente, con las armas sobre el hombro, sus respectivos jefes se saludan, solicitando, tras descansar las armas, permiso para efectuar el relevo a la Autoridad Militar que preside el acto.
• Concedida la autorización, los dos comandantes de las guardias se retiran al Cuerpo de Guardia para efectuar el relevo.
• En tanto se realiza el relevo, la Unidad de Música interpreta dos marchas militares.
• A continuación, se recitan dos artículos relativos al relevo de la guardia pertenecientes a las “Reales Ordenanzas de Su Majestad Carlos III para el régimen, disciplina, subordinación y servicios de sus ejércitos” del año 1768:
  • Tratado segundo. Título primero. Art. 34: “El que le toque entrar de Centinela, cuando fuere llamado por su Cabo, seguirá con el arma bien puesta al hombro y llegando a la que debe mudar, la presentarán ambas. La saliente explicará a la entrante con mucha claridad las obligaciones particulares de su puesto: el Cabo las oirá con atención y satisfecho de que la consigna está bien dada o renovando lo que hubiere omitido al Centinela saliente, encargará a la entrante la exacta observancia de lo que se le ha entregado y que tenga presentes las obligaciones generales que se le han enseñado”.
  • Tratado sexto. Título V. Art. 14: “En las plazas donde hubiere guarnición, se entrará de guardia a las once de la mañana en todas las estaciones del año, cuya hora únicamente podrán variarla los Gobernadores, si las plazas de su cargo se hallaren sitiadas o amenazadas, disponiendo entonces lo que más conduzca al resguardo de ellas y comodidad de las tropas que deben defenderlas”.
• Para continuar con la tradición de lo señalado en los artículos anteriores, se procede al relevo de un puesto. Una vez finalizado el revelo, los cabos y el centinela saliente ocupan su puesto en formación.
• Acto seguido, tras incorporarse a formación, el comandante de la guardia entrante da novedades del relevo a la Autoridad que preside y el comandante de la guardia saliente solicita permiso para retirar la guardia. La guardia saliente, acompañada por la Banda de Cornetas y Tambores y la Unidad de Música del Cuartel General, abandona la Plaza desfilando con las armas sobre el hombro, a los sones de una marcha militar.
• Finalmente, el comandante de la guardia entrante solicita permiso a la Autoridad que preside para retirar la misma al Cuerpo de Guardia del Palacio de Capitanía General.