23/09/2024
La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha llevado a cabo en Portugal su mayor despliegue internacional hasta la fecha. Un contingente formado por 364 militares y 116 vehículos se desplegaron el pasado 17 de septiembre en la región central del país luso, combatiendo los graves incendios forestales que asolaban la zona. Esta operación marca un hito para la UME, ya que por primera vez se ha desplegado un puesto de mando táctico en el extranjero para coordinar la asistencia.
La solicitud de ayuda por parte de las autoridades portuguesas se produjo ante la virulencia de los incendios forestales que estaban afectando la zona norte del país, superando la capacidad de los medios de extinción locales. La rápida respuesta española, autorizada por la Dirección General de Política de Defensa, se materializó en un despliegue escalonado de efectivos y material de los Batallones de Intervención de Emergencias (BIEM) I, II y V, con base en Torrejón de Ardoz (Madrid), Sevilla y León, respectivamente.
A su llegada a la base logística establecida en São Pedro do Sul, la UME se integró en el dispositivo de extinción portugués, trabajando en estrecha coordinación con los bomberos lusos y los medios aéreos. La prioridad inicial se centró en la defensa de las localidades de Mosterinho, Gourim, Cobertinha, Sobral y Val de Maceira, gravemente amenazadas por el avance del fuego.
Los efectivos de la UME han centrado sus esfuerzos en la creación de cortafuegos, la extinción de focos secundarios y la realización de vuelos de reconocimiento con drones para detectar puntos calientes. La orografía abrupta del terreno y la rápida evolución de los incendios, avivados por fuertes vientos cambiantes, han dificultado las labores de extinción.
A pesar de las dificultades, la intervención de la UME ha sido fundamental para contener el avance del fuego y proteger las vidas humanas. Las autoridades portuguesas han confirmado la muerte de al menos siete personas a causa de los incendios. No obstante, la virulencia del fuego ha calcinado ya más de 40.000 hectáreas de terreno.
La mejora de las condiciones meteorológicas, junto con los trabajos realizados, permitieron que el contingente desplegado fuera desactivado el viernes y volviera de forma segura a sus bases de procedencia el sábado 21 de septiembre.
La rápida respuesta de la UME ante la solicitud de ayuda de Portugal, así como la profesionalidad y eficacia demostradas por sus efectivos sobre el terreno, consolidan a la unidad como un referente europeo en la lucha contra las emergencias.