07/03/2014
Uno de los objetivos de este nuevo procedimiento es desplegar de noche estos depósitos de agua en lugares inaccesibles por medio de helicópteros
La Unidad Aeromóvil (UAM) de la UME va a contar en la campaña de LCIF del próximo verano con un elemento más de eficacia en la lucha contra las llamas.
Se trata del posicionamiento en zonas agrestes, inaccesibles para las autobombas, de unos depósitos de agua con capacidad para 1.000 litros, transportados por los helicópteros HU-27 “Cougar”, del BHELEME, en carga externa.
Este procedimiento se usará para atacar o liquidar fuegos por una sección de la UAM tanto en período diurno como nocturno.
La Unidad montará una línea de cuatro depósitos con sistema de mangueras apoyado en motobombas, efectuando los helicópteros las rotaciones necesarias para asegurar el suministro de agua.
La UME busca que esta nueva posibilidad sea una solución en situaciones en las que haya que contener el avance del fuego en terrenos sin acceso para autobomba, en las que haya que proteger infraestructuras o puntos sensibles, dar oportunidad en la extinción de recursos operativos más lentos, apoyar maniobras con fuego desde una línea de control o en focos incipientes de poca intensidad.
El sistema de trabajo precisa el establecimiento de una unidad de helicópteros compuesta por uno o dos “Cougar”, encargada del transporte de la UAM a la zona establecida.
Al mismo tiempo, se fija otra unidad de apoyo donde se encontrarán los depósitos a helitransportar así como el punto de abastecimiento para el mantenimiento de un flujo continuo de suministro de agua. Esta zona no puede estar alejada más de 3 ó 4 Km del paraje en donde se encuentre trabajando la UAM.
El sistema se completa con una red de comunicaciones aire/tierra y tierra/tierra.
Finalmente, señalar, que este nuevo concepto de lucha contra el fuego se configura bajo el principio de asegurar la integridad física de todos los intervinientes del dispositivo, tanto terrestre como aéreo.
