La Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire (PAPEA) volvió a brillar en Madrid, con motivo de la celebración del Día de la Fiesta Nacional, con un salto perfecto para depositar la bandera nacional en el punto previsto.
En esta ocasión fue el cabo primero Moltó el elegido para llevar a cabo la complicada maniobra, aunque detrás de él está todo un equipo de profesionales compuesto por 18 hombres y una mujer, capaces de realizar los saltos más espectaculares y difíciles.
Desde su creación, los 90 hombres y mujeres que han pasado por esta unidad del Ejército del Aire han superado ya los 200.000 saltos. Cada miembro realiza unos 500 saltos anuales y algunos de ellos han superado los 10 000.
Y es que todo entrenamiento es poco para que nada falle, para alcanzar la excelencia la magia y precisión de nuestros paracaidistas acrobáticos en el cumplimiento de su misión.