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CEHISMI - Comisión española de historia militar

Gloria Imperial

Carlos Canales y Miguel del Rey

 Carlos Canales y Miguel del Rey. Gloria Imperial. La jornada de Lepanto. Edaf Ediciones, Madrid, 2021. 325 pp. ISBN 978-84-414-4083-8 

Dra. Alicia Vallina

Comisión Española de Historia Militar

La obra de Carlos Canales y de Miguel del Rey no es una más de las tantas que narran los hechos acaecidos durante la batalla más relevante de la Historia Moderna. No en vano, ambos autores tienen una amplia experiencia en el estudio y análisis de la Historia. Carlos Canales, interesado desde siempre en las leyendas y tradiciones españolas, ha colaborado en infinidad de revistas y programas sobre Historia y ha escrito decenas de artículos y libros como “La primera Guerra Carlista: armas, uniformes y banderas” o “Breve historia de la Guerra de la Independencia” entre otros. Por su parte, Miguel del Rey ha publicado trabajos sobre la guerra de África (1859-60), la Guerra de los Diez años (1868-1878) o “La Guerra de la Oreja de Jenkins” y numerosos artículos especializados en uniformología y vexilología.

 

Así, esta obra titulada “Gloria imperial. La jornada de Lepanto”, con un título que refleja fielmente la importancia que este hecho histórico tuvo para el imperio español, analiza, en 8 capítulos, una de las jornadas más gloriosas de la Historia de España. A ellos les precede una breve introducción justificativa de la necesidad de escribir esta obra, y dos capítulos de apéndices finales. El primero reproduce una serie de documentos enormemente interesantes relacionados con la batalla (instrucciones de Felipe II a don Juan de Austria tras su nombramiento como capitán general, relación de cómo se repartieron las tropas la artillería, bajeles y esclavos apresados a los turcos y la propuesta hecha a don Juan de Austria sobre cómo repartir lo que correspondía a la galera real tras la victoria). El segundo de los apéndices recoge la orden general de combate y la relación de embarcaciones de ambas flotas. Por último, la obra incorpora una nutrida bibliografía que permite al lector obtener una amplia visión del tema favoreciendo su accesibilidad a las fuentes.

“Gloria imperial. La jornada de Lepanto” analiza, en su capítulo inicial, las características y modos de actuación del corso norteafricano, las relaciones políticas y militares de franceses y turcos y los intereses de estos por el control del comercio en el Mediterráneo frente al imperio español. Enormemente interesante es el capítulo siguiente en el que los autores analizan las tácticas de combate empleadas por ambas flotas, sus tipos de embarcaciones y los objetivos de los combatientes. En los capítulos posteriores se lleva a cabo un riguroso análisis de las estrategias turcas por un lado y cristianas por otro para conseguir sus objetivos en el Mediterráneo, cristalizando finalmente, en el último caso, en la creación de la Liga Santa. Así, Canales y del Rey defienden como razones fundamentales de la batalla la búsqueda de poder y los beneficios comerciales que obtendría el ganador de la contienda frente a la siempre esgrimida cuestión religiosa que para los autores queda aquí relegada a un segundo plano. La obra analiza de modo ágil y didáctico las tácticas empleadas por ambos combatientes y el devenir de la batalla, deteniéndose en el choque entre las escuadras de Andrea Doria y el turco Uluch Alí, así como en las consecuencias que el triunfo cristiano tuvo para el devenir de la Historia. El texto cuenta, además, con un buen número de imágenes en color que ilustran hechos de la batalla y a sus ilustres protagonistas (Carlos V en la batalla de Mulberg de Tizano o Felipe II retratado por Sofonisba Anguisola), a través de algunas de las más relevantes obras de arte conservadas en numerosos museos internacionales.

 

La batalla de Lepanto, definida por Cervantes como “la más alta ocasión que vieron los siglos”, sería menospreciada por la historiografía francesa, inglesa e incluso italiana, llegando estos últimos incluso a atribuirse un triunfo fruto de una coalición de grandes potencias, a la cabeza de las cuales se encontraba Felipe II. Pese a que el imperio otomano contaba con la armada más grande y poderosa del mundo, en solo cinco horas esta quedó reducida a cenizas. Una mejor y más avanzada tecnología europea, siguiendo a los autores, fue la razón del triunfo. En Lepanto, tal y como señalan Canales y del Rey, cayeron los mejores corsarios y más experimentados turcos al mando de una flota y, aunque el poder naval del infiel no desapareció por completo, ya nunca volvería a ser lo mismo y el temor infundido por estos se diluiría en el aire como el olor a pólvora mojada.

 

En definitiva, se trata de una obra bien estructurada, de ágil lectura, y enormemente enriquecedora que aporta una nueva visión de la batalla y que permitirá a un lector no especializado conocer con precisión uno de los hechos más relevantes de la Historia Universal.