ALONSO IMPONE LA GRAN CRUZ AL MÉRITO MILITAR AL MINISTRO DE DEFENSA DE PAKISTÁN

25/04/2007 El ministro paquistaní entrega condecoraciones a los que ayudaron tras el terremoto de Cachemira de 2005

Alonso asegura que el esfuerzo de quienes tuvieron la oportunidad de "demostrar su valía y capacidad" y la generosidad del Gobierno de Pakistán unen aún más a los dos países

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, ha impuesto hoy la Gran Cruz al Mérito Militar con distintivo blanco a su homólogo de la República Islámica de Pakistán, Rao Sikandar, en correspondencia con las condecoraciones concedidas por el Gobierno pakistaní a personal español civil y militar que participó en la operación de ayuda de emergencia tras el terremoto de Cachemira de 2005, y en señal de agradecimiento al apoyo prestado por las Fuerzas Armadas de su país a nuestro contingente durante esa actuación.

Alonso destacó ante su homólogo pakistaní que con esta distinción el Gobierno español pretende reconocer los méritos de personalidades y altos mandos de los Ejércitos a favor de la Defensa y de las Fuerzas Armadas españolas. “Concretamente, el distintivo blanco hace alusión a las misiones y a los tiempos de paz”, añadió.

España pretende consolidar las relaciones bilaterales con Pakistán, que es considerado un país clave por su posición estratégica y, desde el punto de vista logístico, para nuestro despliegue en Afganistán.

A este respecto, en el encuentro mantenido hoy entre ambos ministros, Alonso expuso a Sikandar la importancia de que Pakistán siga dando facilidades de tránsito hacia Afganistán para transportar elementos logísticos y material pesado por barco y posteriormente por carretera, como ya se manifestó cuando se enviaron los BMR a la Base de Apoyo Avanzado (FSB) de Herat.

Asimismo, el ministro Alonso reconoció la importante contribución a las operaciones de mantenimiento de la paz por parte de Pakistán, que ocupa un lugar destacado con la aportación de más de 10.000 efectivos entre tropas y observadores.

Por otro lado, Alonso manifestó la intención de su Departamento de aumentar la colaboración con la recién creada Universidad de la Defensa de Islamabad, mediante el intercambio de experiencias académicas y de conocimientos en los campos de la seguridad y la defensa. Además, resaltó la importancia de intensificar los contactos e intercambios de información sobre posibilidades de cooperación entre ambos países y la creación de grupos de expertos que se consideren convenientes de mutuo acuerdo.

Condecoraciones a militares y civiles españoles

Tras la reunión con su homólogo pakistaní, el ministro Alonso ha participado en el acto de imposición de condecoraciones, por parte del presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, a ocho civiles y seis militares españoles que participaron en la operación de ayuda de emergencia tras el terremoto que sacudió la Cachemira pakistaní el 8 de octubre de 2005, y que causó 80.000 muertos y 100.000 heridos. Las condecoraciones impuestas son la orden de Elissar, en sus dos categorías Sitara-i-Eissar y Tamgha-i-Eissar, en señal de reconocimiento y agradecimiento por dichas labores.

Alonso manifestó al presidente Musharraf su agradecimiento en nombre de todos los condecorados, que representan a los más de 400 españoles que participaron en esta operación de ayuda y que “tuvieron la oportunidad de demostrar su valía y capacidad”. “Estas condecoraciones llenan de orgullo a mi país”, señaló.

Igualmente, el ministro destacó que el esfuerzo de quienes participaron en aquella misión y la generosidad del Gobierno de Pakistán al condecorarles, unen ahora más aún a los dos países. “Nos unen, sobre todo, porque la seguridad y la paz son condiciones para la vida, y la vida es vocación de todos los pueblos”, concluyó.

La operación de ayuda de emergencia de la OTAN (Respuesta Solidaria II) mediante el despliegue de una Fuerza de Reacción Rápida fue liderada por España. Tan sólo ocho días después de que la OTAN acordara esta misión, los primeros elementos de las unidades españolas llegaron a Pakistán.

Nuestras unidades aportaron apoyo logístico y de vida, tanto a nuestro contingente como a otros de menor entidad de países aliados. Además, a solicitud pakistaní, realizaron las obras y reparaciones de necesidad más inmediata en ayuda directa a la población.

En total, unos 370 efectivos militares (incluyendo una compañía de ingenieros y elementos de la unidad sanitaria) y 40 civiles  (bomberos, médicos y personal sanitario y técnicos de la Agencia Española de Cooperación Internacional) compusieron esta misión española conjunta, autorizada por el Consejo de Ministros, que permaneció en las zonas de Arja y Bagh durante casi tres meses. El montante global de la asistencia española, añadiendo el coste del despliegue, ascendió a unos 22 millones de euros.